- La capital del juego fue testigo de una gran noche para la escudería Mercedes, dentro de la carrera del título de Verstappen y el punto de Checo.
AFP.- El británico de Mercedes, George Russell ganó este domingo el Gran Premio de Las Vegas, escoltado por su coequipero Lewis Hamilton, con quien hizo un sorpresivo 1-2, en una carrera donde el neerlandés Max Verstappen (Red Bull) aseguró su cuarto título consecutivo en el campeonato de pilotos de la Fórmula 1 al terminar en el quinto puesto.
El español Carlos Sainz Jr. completó el podio al finalizar en el tercer lugar con Ferrari, mientras el mexicano Sergio “Checo” Pérez remontó cinco posiciones para acabar décimo y el argentino Franco Colapinto en el decimocuarto tras arrancar último por las reparaciones que necesitó su auto tras el accidente en la ‘qualy’.
A Verstappen, sexto piloto en la historia en lograr al menos cuatro campeonatos, le bastaba con terminar por delante del británico Lando Norris, quien fue sexto con McLaren en esta histórica carrera nocturna en la capital del juego.
Desde su brillante salida, Russell controló la carrera de principio a fin sin ningún problema hasta firmar su segunda victoria de la temporada. El británico se había hecho con la ‘pole position’ aprovechando la gran adaptación de los Mercedes a un trazado que recibió críticas por la falta de agarre.
El veterano Lewis Hamilton, el otro piloto de Mercedes, hizo una gran remontada y alcanzó el segundo escalón del podio después de iniciar desde la décima plaza.

Max Verstappen se coronó y es Tetracampeón de la Formula 1
Era inevitable. Max Verstappen llegó a Las Vegas, lo apostó todo y salió con el premio más grande: el título. El piloto neerlandés se convirtió en tetracampeón del mundo tras una temporada en la que comenzó en lo más alto, con un dominio absoluto que parecía indicar que se coronaría, nuevamente, temprano en el calendario; sin embargo, no fue así.
Los cambios internos en la escudería, las fallas en el RB20 y los pleitos con el equipo en los pits se convirtieron en la normalidad, y por eso, el de Red Bull tuvo que demostrar una y otra vez que no sólo se trata del auto, sino de las manos que lo controlan.
Lando Norris, de McLaren, se convirtió en su sombra durante la temporada, acechándolo en cada curva. Sin embargo, Verstappen mostró su superioridad y el talento que lleva en su ADN, brindando carreras espectaculares como la de Japón y, claro, la de Brasil, donde remontó desde el fondo de la tabla dejando claro que no dejaría nada en la lucha por el campeonato.
En el circuito callejero de Las Vegas, el de Red Bull mostró que no sólo tiene talento, también tiene madurez. Decidió no arriesgar de forma innecesaria e hizo su propia carrera. No luchó contra los Mercedes, ni contra los Ferrari. Eran superiores en el ritmo de carrera, y él sólo necesitaba una cosa: terminar por delante de Norris.
Cayó la bandera a cuadros, ondeada por Sylvester Stallone, y aunque el primero en cruzar la meta fue George Russell, la gran esfera de Las Vegas se iluminó para mostrar la cara de Verstappen y la leyenda “campeón del mundo”.
El garaje de Red Bull cambió sus uniformes por unas playeras alusivas al cuarto título de su piloto. En la radio, Horner felicitó a Max, quien respondió conmovido, recordando todo lo que ha pasado en esta larga temporada: “Gracias, gracias, gracias a todos. Ha sido mucho lo que pasamos este último año y lo dimos todo. Gracias, muchachos”.
Con este logro, Max entra a un exclusivo y pequeño grupo de pilotos que han logrado esta hazaña de coronarse en cuatro ocasiones en la Fórmula 1, sumándose a Prost, Vettel, Fangio, Hamilton y Schumacher.
A Verstappen le falta mucho camino por delante, y su estrella está lejos de apagarse. Este domingo, el Strip de Las Vegas se iluminó sólo para él.