.- En emotivo evento que reunió a la gran familia charra, Luisa Echevarría Aguirre fue coronada como reina nacional de la Federación Mexicana de Charrería, protocolo realizado en Tepic, ante la presencia de autoridades nacionales del considerado deporte nacional por excelencia.

La joven nayarita recibió la corona en forma de sombrero charro de la anterior reina, María Isabel I, para convertirse en Luisa I, nueva soberana y representante de la charrería nacional.

Luisa I agradeció en su primer mensaje como soberana a su familia, a sus abuelos don Antonio Echevarría Domínguez y Martha Elena García, a sus padres Antonio Echevarría García y María Luisa Aguirre, y a su hermano Antonio Echevarría Aguirre, así como al presidente de la Federación Mexicana de Charrería, José Antonio Salcedo López.

“Mi entera gratitud por permitirme cumplir mi sueño, de representar nuestra cultura y tradiciones; los charros somos una raza que lleva a nuestro México en la piel”, expresó la nueva reina charra.

Se dirigió al presidente de la Federación Nacional de Charrería, José Antonio Salcedo López: “Debo representar a la mujer charra, a las damas de a caballo, a las Amazonas Mexicanas, a la figura femenina dentro de nuestro deporte. Más aún, sé de sobra que la figura de la Reina Nacional no sólo representa a la mujer, sé que a partir de hoy represento a hombres y mujeres, a nuestra Patria, a nuestras raíces, tradiciones y costumbres, a nuestro México. Confíe en que trabajaré por ser una representante digna y que siempre llevaré nuestro estandarte con orgullo y respeto”.

Luisa I

El protocolo contó con reinas invitadas de asociaciones charras de distintos estados del país, quienes participaron en un vals como parte de la ceremonia de investidura.

El reinado de Luisa I tendrá una duración de dos años, y en su encomienda representará a la Federación Mexicana de Charrería en los campeonatos y eventos oficiales, así como ante los tres niveles de gobierno en los que la Federación sea invitada deberá dignificar la vestimenta charra y de las escaramuzas, y promover la charrería en las nuevas generaciones de jovencitas.

Fue una noche emotiva en la que Luisa I reiteró que cumplirá con emoción: “Hoy es un gran día para mí, doy inicio a una etapa en mi vida que marcará mi historia y me permitirá quedar en alguno de los capítulos de la Charrería Nacional como Reina Nacional, papel que cumpliré con alegría, respeto y orgullo. Estoy aquí por el gusto de representar a mi estado y a mi país, por el placer de trabajar por la charrería, en la que he echado raíces; he hecho amistades entrañables y una gran familia charra”.( Javier Carrillo)


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