- La llegada de la presidenta Claudia Sheinbaum despierta una esperanza para las mujeres mexicanas, quienes enfrentan retos crecientes en el terreno económico, laboral y de seguridad.
.- “No llego sola, llegamos todas”, dice la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo frente a las mexicanas que dan testimonio de la primera mujer electa en las urnas para conducir el destino de México y quienes guardan la promesa de mejores condiciones para todas las mujeres.
Y el reconocimiento de este capítulo histórico del país ha tenido eco a nivel internacional. A finales del año pasado, la política mexicana de 63 años ocupó la cuarta posición en el ranking “The World’s Most Powerful Women”, elaborado anualmente por Forbes, tan solo por debajo de Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea; Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo; y Giorgia Meloni, primera ministra de Italia.
Sin embargo, a pesar de la esperanza que despierta la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia del país, las mujeres mexicanas aún enfrentan retos que no les permiten cantar victoria frente a este capítulo histórico y que ponen de manifiesto la urgencia de tomar acciones en diversos ámbitos.
Una mayor integración de las mujeres a la economía formal, vencer la brecha salarial, acabar con la violencia de género, forman parte de algunas de las tareas pendientes frente a las mujeres en México.

Una deuda con la economía
Durante los últimos 10 años, la participación económica de las mujeres en el país pasó de 43% a 46%, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“Esta cifra está por debajo del promedio de los países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), la cual alcanza 67%. De no diseñar estrategias oportunas para acelerar la incorporación de más mujeres, a México le tomaría 56 años alcanzar la tasa de participación económica que hoy tienen estos países”, asegura el reporte “Más mujeres, mayor crecimiento. Impacto económico a nivel nacional y estatal”, elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
En este sentido, si se acelerara la participación de las mujeres en la economía, el país podría incrementar su Producto Interno Bruto en 6.9 billones de pesos en la próxima década, lo que se traduce en 630,000 millones de pesos al año, dice el centro de investigación.
“Para alcanzar el nivel de participación que mantiene hoy la OCDE, México tendría que incorporar a 18.6 millones de mujeres a su economía para 2035”, de acuerdo con la investigación.
Por ello, la implementación de políticas públicas y privadas es sumamente importante para promover una mayor participación de las mujeres en la vida económica del país. Y es que las labores de cuidados recaen sobre este segmento de la población, lo cual limita su desarrollo profesional.
Desde el sector público es importante construir un Sistema Nacional de Cuidados (SNC) e implementar licencias de paternidad obligatorias; mientras que las empresas deberían crear estrategias de flexibilidad laboral y políticas de cuidados.
Asimismo, el trabajo del sector público y privado debe permitir que la brecha salarial desaparezca. En México, las mujeres tienden a ganar 15% menos que los hombres, lo que implica la necesidad de establecer indicadores, mayor transparencia al interior de las empresas y la generación de reportes para establecer mecanismos de acción, por mencionar algunas acciones.
“Estandarizar la medición de la brecha salarial, la transparencia salarial y la institucionalización de políticas de cuidado son acciones clave que pueden generar un impacto positivo en la igualdad laboral. Tanto el sector público como el privado tienen un papel crucial en reducir la brecha salarial y promover la igualdad de género en el mercado laboral”, dice el Imco en su reporte “¿Cómo cerrar la brecha salarial? Estrategias para erradicarla en México”.
La violencia
Abatir la violencia hacia las mujeres es otro de los grandes pendientes que demandan las mujeres cada año en México. Un 70.1%, de un total de 50.5 millones de mujeres de 15 años y más , ha experimentado, al menos, una situación de violencia a lo largo de su vida, de acuerdo con la última edición de la última edición de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021.
Entre las principales formas de violencia se encuentra la violencia de psicológica, con una prevalecencia de 51.6%, seguida de la violencia sexual, con 49.7%, la violencia física, con 34.7%, y la violencia económica, patrimonial y discriminación, con 27.4%.
En comparación con 2016, los resultados de 2021 mostraron un incremento de cuatro puntos porcentuales en la violencia total contra las mujeres a lo largo de la vida. La violencia sexual registró el mayor aumento (8.4 puntos porcentuales).
Asimismo, el feminicidio o asesinato de una mujer por razones de género se mantiene como una preocupación latente en la sociedad mexicana.
“En México, los casos registrados de feminicidio han aumentado de forma significativa en la última década, pasando de 428 víctimas reportadas en 2015 a 829 en 2024, lo que representa un incremento del 93.7%”, de acuerdo con el Índice de Paz México 2025, elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz.
Mientras que los feminicidios en 2015 representaban el 19.8% de los homicidios de mujeres, esta proporción aumentó al 24.2% en 2024. Actualmente, aproximadamente 1 de cada 4 asesinatos de mujeres en México se clasifica como feminicidio. “No llego sola, llegamos todas”, dice la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum Pardo, mientras que las mujeres tienen la esperanza de vivir un cambio positivo en los diferentes ámbitos de sus vidas. La mujer más poderosa de México tiene varios retos por vencer.
Como cada año, Forbes México presenta el listado de las 100 Mujeres más Poderosas de México 2025, las mujeres presentes en esta edición saben que hay nuevos objetivos por alcanzar, para que más protagonistas tomen el poder.